Tras un partido con sabor agridulce, la selección Mexicana de fútbol olímpica se corona como campeón del preolímpico de la CONCACAF, acumulando su tercer título de forma consecutiva en dicha categoría.
El encuentro inició en el Estado Akron con una Honduras sorpresiva y dinámica, aunque sin aproximaciones de peligro tal y como si lo tuvo el cuadro azteca, para poco a poco ir inclinando la balanza hasta meter a atrás al cuadro azteca.
Algunos minutos fueron trascendentes cuando Sebastián Jurado tuvo que salvar al tri en jugadas importantes, convirtiéndose en la figura del partido al contener a una envalentonada Honduras que seguía con las ganas de llevarse el título, abriendo el marcador al 71 vía Edwin Rodriguez tras una mala salida del equipo mexicano y un tiro de media distancia que batió al portero de Cruz Azul.
Ya para el cierre de partido, el equipo Mexicano empezó a apretar, hasta que en una desafortunada jugada para el cuadro carta Chi derribaron a JJ Macías dentro del área, lo que el árbitro Jamaiquino Daneon Parchment dictaminó como pena máxima al 80 y el mismo delantero de Chivas puso la igualada.
Los 90 minutos y el tiempo extra transcurrieron sin ningún tipo de inconveniente, lo que llevó a la tanda de penales el juego cerrado, atajando el primer disparo Jurado y sentenciando la eliminatoria 5-4
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